Borrés a 860 m de altitud y a 5 km. de Sabiñánigo. Levantado en el Valle del río Guarga, presenta una arquitectura popular típica de toda la zona, si bien ha sufrido continuas transformaciones. Tuvo Ayuntamiento propio y en 1845 se unió a Cartirana. En la actualidad pertenece al municipio de Sabiñánigo.
Ya en 1700, se tienen noticias sobre el linaje de los Borrés ostentado por una familia infanzona radicada en Jaca y el topónimo se conserva en la actualidad como apellido. Borrés se constituye a lo largo de una calle donde se alinean sus casas y bordas. Al final se encuentra la plaza de la iglesia, en la parte más alta del pueblo. Sus edificios se conservan en buen estado aunque han perdido en su mayoría el aspecto tradicional.
La iglesia, construida entre los siglos XVII y XVIII, está compuesta por una nave rectangular terminada en un ábside poligonal, estando cubierta con bóvedas de lunetos.
Interesantes las bordas, destacando en una de ellas un pesebre curioso en su fachada, así como las buhardillas, puertas y ventanas adoveladas, presentes en Casa Galindo, Casa Rabal y La Casona.
Pero quizá la pieza de arquitectura popular más interesante sea el crucero existente a la entrada de la población, en la que puede apreciarse la siguiente leyenda: “Marco Rabal. Año 1748. Esta Cruz es de Lucas Rabal”.